Lejos de la orilla
Uno de los milagros más extraordinarios del Señor fue cuando Él caminó sobre las aguas… sin embargo los discípulos pensaron que era un fantasma. ¿Por qué no le creyeron? ¿Por qué dudaron de Su poder si ya lo habían visto resucitar muertos, aquietar vientos embravecidos y sanar paralíticos? Quizás fue porque estaban en un bote lejos de la orilla y se sentían más vulnerables… Pero es allí, cuando nos alejamos del confort de la orilla cuando el Señor hace los mayores milagros.