Haciendo Lo Correcto Con La Motivación Incorrecta – Pastora Ana Olondo

Haciendo Lo Correcto Con La Motivación Incorrecta – Pastora Ana Olondo

No siempre hacer lo correcto es lo que Dios va a contar como válido. Porque hacer lo correcto con la motivación incorrecta hará que el resultado sea malo. Por ejemplo, ir a la iglesia un domingo es bueno pero si la motivación de tu corazón no es la verdadera adoración a Dios, ese acto bueno no tendrá un resultado aceptable ante Dios.
Deja que Dios a través de esta predicación redarguya tu corazón, ¿estás dispuesto?

Hch 8:9 Pero había un hombre llamado Simón, que antes ejercía la magia en aquella ciudad, y había engañado a la gente de Samaria, haciéndose pasar por algún grande.
Hch 8:10 A éste oían atentamente todos, desde el más pequeño hasta el más grande, diciendo: Este es el gran poder de Dios.

Hch 8:11 Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas les había engañado mucho tiempo.
Hch 8:12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres.

Hch 8:13 También creyó Simón mismo, y habiéndose bautizado, estaba siempre con Felipe; y viendo las señales y grandes milagros que se hacían, estaba atónito.
Hch 8:14 Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan;
Hch 8:15 los cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu Santo;
Hch 8:16 porque aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús.

Hch 8:17 Entonces les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo.
Hch 8:18 Cuando vio Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo, les ofreció dinero,
Hch 8:19 diciendo: Dadme también a mí este poder, para que cualquiera a quien yo impusiere las manos reciba el Espíritu Santo.

Hch 8:20 Entonces Pedro le dijo: Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el don de Dios se obtiene con dinero.
Hch 8:21 No tienes tú parte ni suerte en este asunto, porque tu corazón no es recto delante de Dios.
Hch 8:22 Arrepiéntete, pues, de esta tu maldad, y ruega a Dios, si quizás te sea perdonado el pensamiento de tu corazón;
Hch 8:23 porque en hiel de amargura y en prisión de maldad veo que estás.

Hch 8:24 Respondiendo entonces Simón, dijo: Rogad vosotros por mí al Señor, para que nada de esto que habéis dicho venga sobre mí.
Hch 8:25 Y ellos, habiendo testificado y hablado la palabra de Dios, se volvieron a Jerusalén, y en muchas poblaciones de los samaritanos anunciaron el evangelio.

Isa 5:20 ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!
Isa 5:21 ¡Ay de los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos!
Isa 5:22 ¡Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida;
Isa 5:23 los que justifican al impío mediante cohecho, y al justo quitan su derecho!

Isa 5:24 Por tanto, como la lengua del fuego consume el rastrojo, y la llama devora la paja, así será su raíz como podredumbre, y su flor se desvanecerá como polvo; porque desecharon la ley de Jehová de los ejércitos, y abominaron la palabra del Santo de Israel.

Isa 5:25 Por esta causa se encendió el furor de Jehová contra su pueblo, y extendió contra él su mano, y le hirió; y se estremecieron los montes, y sus cadáveres fueron arrojados en medio de las calles. Con todo esto no ha cesado su furor, sino que todavía su mano está extendida.